Esta vez no se trata de la ficción tratando aparentar realidad, sino al revés. Existe un gusano, el Leucochloridium Paradoxum, que una vez dentro de un caracol, es capaz de infectar su cerebro, dominar su voluntad y dirigirlo hacia una muerte segura, exponiéndolo a los pájaros. Los pájaros los devoran y vuelven a excretar el gusano. Y esos excrementos los consumen los caracoles, perpetuando el ciclo. Suena muy a THE INVASION OF THE BODY SNATCHERS (1978). ¿Y si descubrieran que los frikis y los geeks están infectados por un parásito similar? Supongo que el mejor tratamiento serían los rayos del sol, el alcohol y el género femenino. Enjuto Mojamuto lo tendría mal, pero en Cyberhades podemos estar tranquilos. Algunos, al menos. Atentos al vídeo.